Toda la noche hago la noche.Toda la noche escribo para buscar a quien me busca.Palabra por palabra yo escribo la noche

sábado, octubre 06, 2012

El ViAjE SaGrAdO


Nos dicen las tradiciones que si uno quiere realizar unViaje Iniciático, debería peregrinar hacia ciertos sitios siguiendo rutas establecidas, fijandose sobre todo en ciertos Caminos: el que lleva a Santiago de Compostela, el de Jerusalén, el de Roma...

Pero si estamos conscientes de que el sentido de estos viajes es, generalmente, la búsqueda de sabiduría ancestral, de un cambio que nos transforme, cumplir un sueño, etc..., nos daremos cuenta que el viaje es más bien una cuestión personalísima e interna que no depende tanto del lugar. Cada quien puede hacer su viaje y encontrar su camino, cada quien sabe el sitio al que desea ir. Yo lo sabía bien desde hacía tiempo: El Sagrado Bosque de Bomarzo.Y en este viaje a Europa, éste y mi viejo castillo en Versalles fueron los puntos centrales.

Ya alguna vez conté como es que conocí este peculiar lugar entre sueños. Este año, en mi cumpleaños, finalmente pude hallar la novela del mismo nombre que cuenta la vida del Duque y la creación del maravilloso bosque. La leí con avidez y es posiblemente la mejor novela que haya leído. Y comencé a planear el viaje. Me pasé horas y horas leyendo en la red, buscando rutas y testimonios de gente que hubiera estado allá. Gracias a ellos obtuve cuatro rutas y supe también que las vías de acceso son complicadas.

Y emprendí el viaje. Lo primero, llegar a Roma, a la estación de trenes. Hay que atravesar pruebas en este tipo de viajes. Recuerdo que mi maestra de Historia del Arte habla siempre de "la mágica luz del sol de Roma". Pues bien, puede que haya sido el choque entre mi espíritu pagano y la ciudad donde reside el máximo representante de la Iglesia católica, pero el día que llegamos a Roma fue un día de frío y lluvia. Segunda prueba de paciencia: en cuanto entramos a "Termini", la estación de trenes, pisé algo MUY desagradable. Qué hacía eso ahí? No quiero saber, pero fue un mal modo de recibirme.

La otra es que con tanta lluvia no sabía si el ahora "Parque de los monstruos" estaría abierto. La verdad es que todo me estaba desanimando. A eso hay que sumarle que sé apenas una pizca de italiano y la gente no ha sido muy amable, muchos no entendían español,inglés ni francés y no han estado muy dispuestos a colaborar. Una señora encargada de atender a los turistas hasta nos dijo "pero a que van? está lloviendo, no es bonito" cuando le preguntamos si el parque estaría abierto y nos recomendó tomar un tren a Attigliano. Por suerte yo ya había leido que NO debía ir por allá, pues es aún más dificil llegar.

Aún con tanta complicación logramos subirnos a un tren con rumbo a Orte, de donde debíamos tomar un camión que nos llevaría a Bomarzo. Llegamos a Orte tras cerca de una hora de camino. Ya casi no llovía. Revisamos los horarios...pasarían horas enteras antes de que llegara el siguiente autobus a Bomarzo. Había que buscar más opciones y la lluvia comenzaba de nuevo. Fuera de la parada encontramos un letrero de "taxi" con un teléfono. Llamé, escupiendo todo el italiano que sabía logré hacer entender al sr que lo necesitaba para ir al "Parco dei mostri". Nos cobraba 30 euros. No sé si era caro, pero era más o menos lo que tenía planeado y no había más opciones.

En unos minutos el taxi llegó. Resultó ser un auto particular y el taxista un señor bastante simpático que nos intentó hacer la plática en el camino, aún con las dificultades del idioma. El regreso nos preocupaba...el parque está a casi 25 km de la estación de Orte, así que le hemos pedido al taxista que regresara por nosotros en 2 horas y nos llevara a Roma. Roma queda a más de 100 km y nos cobró 150 euros por el regreso. Valga decir que un euro son 17 pesos mexicanos..es decir 150x17...un gasto considerable, pero que vale la pena.

Llegamos al bosque. 10 euros la entrada. Primera cosa decepcionante: no permiten fotos ni video. Así que...a esconder bien la cámara; NO iba a viajar tantos kilómetros para quedarme sin algunas fotos de recuerdo. Nos dieron un pequeño mapa..Yo llevaba uno sacado de un libro que proponía un "recorrido alquímico", pero tristemente para ese entonces la hoja ya estaba casi deshecha por la lluvia.. Eramos los únicos visitantes. No había nadie más..todo el bosque para nosotros solos.

Lo primero que se ve son las Esfinges que custodian el sitio. Les pedí permiso mentalmente para entrar empezamos a andar y las imponentes figuras comenzaron a surgir. La pelea de los gigantes de piedra, con inscripciones antiguas apenas visibles. Un rumor de agua nos hizo acercanos a la corriente que rodea parte del bosque, cerca de una gigantesca tortuga con una mujer de pie sobre su caparazón. Enfrente la Fuente de Pegaso. Era increible estar allí, sentir el aire fresco y tratar de recordar los pasajes de la novela en que el Duque explica el significado de cada escultura. Nos metimos a la Torre/ Casa Inclinada..se siente muy extraño..y luego las figuras de Dioses Antiguos: Ceres, Ares, Neptuno...mi alma pagana brincaba de alegría..... Tristemente, cuando reviso el mapa, ahora , en casa, resulta que me han faltado un par de cosas por ver...pero es que sin señalamenientos y en medio de tanta emoción, era dificil hacer un recorrido formal completo.

Ariadna durmiendo y Neptuno son impresionantes y se siente una energia maravillosa que sale de ellos. En general, se sentía una brisa y el aire movía las hojas de los árboles cada vez que dejábamos una figura y nos dirigiamos a otra, casi como una señal de nuestros pasos. Fantasmas? Espíritus? No dudaría que el Duque siguiera por allí..es un lugar tan suyo, tan bello, tan telúrico...que si hubiera sido mío, dificilmente lo habría dejado. Y si no es el duque, seguro que espíritus etruscos no faltan, pero de los buenos, no de los que asustan.

El Oso Heráldico de la familia Orsini también me causó gran emoción (lamento la pésima foto) y la pequeña "plaza" llena de esculturas de piñas de pino y bellotas es hermosa. Luego aparece Proserpina casi como una banca y mas allá se ve el can Cerbero...a esas alturas, si siguieramos el mapa, ya debíamos haber pasado por el Orco, la boca del Infierno, el de mis sueños y quizás la más famosa figura del bosque. Y al fin la vi...corrí hacia ella y me detuve a unos pasos. Me quedé congelado. "Ogni pensiero vola" dice la inscripción..Y es imposible que no se vayan todos los pensamientos estando frente a algo así. Era increíble...allí estaba yo, en el mismo sitio de mis sueños, viendo aquella boca que tanta impresión causara en el Duque. Y pudimos eludir la vigilancia (si, había un sujeto siguiendonos "discretamente" a cierta distancia) para que me tomara la foto...y nos introdujimos en la boca..dentro hay una pequeña mesa de piedra, donde tmb tomamos una fotografía. Siempre recordaré eso y el momento en que el Duque relata sus intenciones de volverse ermitaño dentro de ese sitio.

Al salir nos dirirgimos al Mausoleo. Hermoso, aunque ahora tiene dentro las fotografías de dos personas que, segun entendí en mi mal italiano, ayudaron a restaurar el parque. No sé hasta que punto apoyo esa idea..como sea, la construcción es magnifica, aunque claro que alejados del adorno barroco que tanto me gusta. 
Estaban por cumplirse el plaza para que el taxi volviera asi que nos apresuramos a volver. Al fondo vimos la inmensa figura de Glauco, como un pez mostrando los dientes, después de la cabeza de Jano con sus dos rostros...quedaban unos minutos y decidimos volver a la cabeza de Orco...a despedirnos, y a pedir regresar...De verdad quisiera volver y ver todo con aún más calma y estar ahí horas y horas. Ya será. Y bien...hora de volver, solo pasamos a la pequeñisima tienda. Como colecciono anillos, mi ilusión era hallar un anillo con la cara del orco (una idea brillante) pero solo tienen algunos libros, imanes, dedales y algunas postales, todo a precios de oro. Sólo compré un pequeño recuerdo por no dejar, para decir que había traido algo "material", porque he vuelto cargado de recuerdos, paz, un inmeso amor por ese sitio y muchas ganas de volver, a pesar de las dificultades. Fue un viaje iniciático, aunque no aparezca así en ningún mapa. Por ahora, leeré la novela de nuevo y buscaré luego comprar alguno de los libros que vi en su tienda.